El anillo diamante se caracteriza sobre todo por sus diversas posibilidades de diseño. Un anillo engastado con diamantes puede ser de oro, plata y platino y también tener diferentes aleaciones de color. Lo que más diferencia a los anillos son los diamantes engastados en ellos de distintas formas. Pueden diferir en tamaño, claridad, talla y color, así como en el número de diamantes engastados. En los anillos de diamantes, las tallas brillante y princesa son especialmente populares, por lo que las piedras tienen forma redonda u ovalada. Si los anillos tienen un único diamante más grande en el centro, suele estar engarzado en garra. Sin embargo, también hay engarces en bisel que encierran completamente la piedra por un lado. Si hay varias filas de diamantes, el engaste pavé es el más adecuado. Los anillos con diamantes engastados en toda la banda también se denominan anillos de la eternidad, porque no tienen principio ni fin. Los anillos de diamantes son populares como anillos de compromiso y de boda, pero también pueden servir como regalo para una persona especial o para uno mismo. Gracias a su brillo y destello, se centran directamente en la mano y atraen todas las miradas. Además de diamantes, también se pueden engastar otras piedras preciosas, como rubíes, zafiros y esmeraldas, que aportan un toque de color.
